La materia prima que utiliza Cotnyl para elaborar sus líneas de recipientes para ser expuesta a temperatura está garantizada: no genera ningún tipo de riesgos para la salud, no sufre alteraciones que implique transferencias de sustancias tóxicas, ni modificaciones en el aroma y sabor de los alimentos.
A menudo circulan informaciones que nos permiten advertir sobre la posibilidad de tomar contacto con productos manufacturados que pueden resultar dañinos para nuestra salud.
Existen más de 100 familias y tipos de plásticos que se utilizan para una infinidad de aplicaciones. El polipropileno (PP) y el PET son de los más utilizados para la fabricación de envases para alimentos y son considerados casi tan nobles como el vidrio. Además de presentar enormes ventajas por su capacidad para ser moldeado, su bajo peso y por ser un buen aislante, el PP agrega la propiedad de ser una muy buena barrera al vapor de agua.
Sin embargo, cada tanto se difunde la noticia de que una sustancia denominada Ftalatos suele encontrarse en los contenedores de comida, envoltorios y botellas de agua. Esta sustancia pertenece a una familia de plastificantes aditivos que no se utilizan para la fabricación de productos conformados en PP, ni en PET.
Así como tampoco, ni el PP ni el PET, contienen la sustancia conocida como Bisfenol-A (BPA) que se usa para la fabricación de resinas como el Epoxi y el Policarbonato.
Es importante saber que los procesos de generación de la materia prima plástica, así como los procesos industriales y de reciclado habilitados para tal fin deben garantizar las propiedades constitutivas de los materiales en función de los requisitos dictados por los organismos oficiales.
La compatibilidad plástico-alimento exige un mínimo de interacciones para que desde el diseño del envase se elijan los materiales apropiados de manera tal que no altere los caracteres sensoriales, ni afecte la inocuidad del alimento. Cotnyl cumple con estos requisitos, incluso en aquellos envases que son sometidos a temperaturas de calentamiento o cocción ya que están aprobados para el contacto con alimentos en condiciones de uso.
Es así que Cotnyl posee las certificaciones nacionales emitidas por el Instituto Nacional de Alimentos (INAL) y SENASA, cumpliendo con las mismas exigencia que poseen las legislaciones del Mercosur, la Unión Europea y la FDA de los EEUU. Todos los productos son testeados en el marco de un Sistema de Gestión de la Calidad.
Cotny procesa 3 tipos de plásticos. En particular, el polipropileno puede ser incorporado al microondas hasta 120ºC sin sufrir alteraciones en su estructura física, así como tampoco transfiere sustancias tóxicas, ni produce modificaciones en el aroma y sabor de los alimentos.
Las bandejas fabricadas en CPET, y que comúnmente se utilizan para los servicios de catering, pueden permanecer en el horno hasta los 200ºC, desarrollando la cocción de los alimentos sin ningún tipo de alteración orgánica.
También, desde el origen del diseño, Cotnyl busca la compatibilidad de sus envases con el medio ambiente , es por eso que otro grupo importante de envases fabricados por la empresa proviene de material PET reciclado de descarte industrial y post consumo (aprobados para contacto con alimentos por los mismos entes reguladores).
Gracias a que Cotnyl es una de las pocas compañías que posee el equipamiento necesario para producir sus propias láminas con un proceso de descontaminación y limpieza de esta materia prima, se logra contribuir al cuidado ambiental y a la sustentabilidad.